Elvira trabaja en Bodegas Arrayán: Opinión Curso de Sumiller

Caso de éxito del curso de Sumiller: Opinión de Elvira

 Elvira tenía claro que quería dedicarse al mundo del vino… y lo ha logrado. Tras formarse como Sumiller Profesional y realizar las prácticas en Bodegas Arrayán, hoy trabaja en su equipo comercial. Su historia demuestra que sí es posible abrirse camino en una bodega empezando desde cero. En la siguiente entrevista nos cuenta cómo ha sido su experiencia con el curso y con las prácticas.

TRABAJAR COMO SUMILLER

¿Qué te llevó a formarte como sumiller?

 Vi que era un mundo muy interesante y con buenas salidas profesionales. Eso fue lo que me motivó a formarme y a entrar en este sector.

¿Has conseguido el objetivo que tenías al empezar?

 Sí, incluso podría decir que he superado mis expectativas. Nunca imaginé poder dedicarme plenamente a este ámbito. Ha sido una sorpresa y un logro muy satisfactorio.

¿Cómo describirías tu experiencia formativa en el curso de Sumiller Profesional?

 Recibí una formación muy completa. Fui viendo todas las etapas del mundo del vino y eso me permitió abarcar todo lo que conlleva esta profesión.

¿Cómo fueron tus prácticas en la bodega?

 Inicié mis prácticas casi al mismo tiempo que la formación y la experiencia fue muy grata. Aprendí muchísimo in situ, acompañada por profesionales con muchos años de experiencia.

¿Cómo viviste la noticia de que te contratarían tras las prácticas?

 Fue una alegría enorme. Es algo que fue creciendo poco a poco durante el tiempo que estuve en prácticas y me dio mucha satisfacción poder seguir creciendo a nivel profesional.

¿Cuál es tu función actual dentro de la empresa?

Mi día a día abarca de todo, pero como comercial estoy enfocada en la comercialización a nivel nacional. Trabajo con distribuidoras, con clientes de hostelería y también apoyo en tareas dentro de la bodega: pedidos, embotellado, vendimia, elaboración… Lo que más disfruto es que cada día aprendo algo nuevo.

¿Qué conocimientos del curso aplicas en tu trabajo?

Sobre todo la formación en viticultura y enología. Esos cimientos que adquirí los pongo en práctica casi todos los días, ya sea en la parte comercial o apoyando en bodega.

¿Qué cualidades consideras importantes para dedicarse al mundo del vino?

Tener una buena base, una formación sólida y muchas ganas de aprender. La pasión por el mundo del vino es crucial.

¿Qué consejo darías a otros compañeros que quieran seguir tu camino?

Que disfruten del proceso, que se empapen bien de todo lo que aprendan y, sobre todo, que busquen unas buenas prácticas. Son fundamentales para dar el salto al ámbito profesional.

¡Enhorabuena Elvira por haber logrado hacer de tu pasión tu profesión!